lunes, 29 de junio de 2015

De tu cálida ausencia mientras llueve.


Puse (play a) tu canción para recordar que te extraño,
que con la lluvia te haces más necesaria que el café
en mis manos, mis labios, aquí,
para hacer dibujos en las ventanas,
para desear resguardarme entre las sábanas.

Estoy cansado y medio ciego,
el humo se inventa en el vapor,
y la música en las gotas golpeando los cristales,
de la ventana, de mis coche, de mis anteojos,
entre el tú y el nosotros
hay más sueños que deseos,
más letras que caricias.

Que ganas de hacerme canción
para besar tu cuello hasta tu oído,
que ganas de ser mis manos
que te desnudaron anoche
sin que tú lo supieras,
sin tu ausencia,
sin ti, sin nada.

Mientras hago un balcón con las palabras
para mirar la lluvia de tu mano,
de la mirada de Dios caemos
amando el recuerdo que amamos,
pensando que somos
el lugar que no merecemos
pero que buscamos.

Puse tu canción sin que te enteres,
sin que sepas siquiera que es tuya,
o que la lluvia me llena de ganas de ti,
de tu ausencia que me abraza
y se hace dulce y cálida,
porque es lo único que  conservo
de tí.

sábado, 20 de junio de 2015

A estas horas de la tarde

A estas horas  de la tarde
cae la lluvia sobre nuestras palabras,
tu piel se vuelve tinta y mis manos
el sonido de mis alas.

Las ventanas se cierran a la luz,
y tus piernas a mis ojos,
se abren los silencios
en tus labios mi nombre
crece más dulce,
besa el aire,
enciende tu cama,
mis momentos
de calma
no corras
delante hay un abismo
que nunca termina,

A estas horas de la tarde
crecen las palabras
y las ganas
ganan la batalla.

Habría que dejarse caer
estrepitosamente,
en caída libre,
igual que mis labios
sobre los lunares
que hay en tu pecho
y en el tatuaje de mis ojos
en tu espalda,
mi deseo revolotea
de tus tobillos
hasta el territorio
- suave -
de tus nalgas,
de tu sexo,
de tu piel salada.

No tardes,
Abril nos ha olvidado
y Agosto promete demasiado,
no tardes, a estas horas de la tarde
llueve y tu cuerpo se forma
de promesas y duerme, a mi lado.