jueves, 17 de diciembre de 2015

Que tu recuerdo sea quien muera entre mis brazos, no al revés.


Dice Jorge Villalpando que me lee como hace años, con "insolente nostalgia", tiene razón.
Bebámonos unas cervezas para darnos - de nuevo - la razón.


Nostalgias insolentes

Hay nostalgias que abro entre libros,
entre comas y siga por favor bebiendo.
Hay recuerdos que me invento para seguir viviendo,
y un montón de sueños en almohadas en que ya no duermo.

Tengo un puñado de rencores que descansan
en otras manos con la soledad a medias.
Hay ganas de andar sin zapatos,
esperanzas de levantar la mirada/ el vuelo/ el canto.

Hay ganas de cerrar las puertas, las heridas,
de iniciar a sonreír de tanto en tonto, confiado, confiando
en que el silencio es paz y el amor una mirada,
¿qué sembramos en otros ojos que ya no dicen nada?

Hay nostalgias canallas, insolentes
como dormir en la boca ajena,
en la piel que llevamos en las manos
pero ya no nos pertenece.


jueves, 19 de noviembre de 2015

Estoy harto -sospecho-

De buscar un beso entre las piedras,
un buenas noches en el infomercial,
de pretender que volver es igual a no haberse ido,
que mi agenda no esta llena de llamadas sin contestar.

De callarme las ganas de mandarte al diablo,
de la necesidad pendeja de creer en tus mentiras,
de la urgencia lacerante de tus labios,
o de los labios de cualquiera que quiera estar.

De sentarme quietecito bajo el árbol,
de mirar como la rabia crece,
de esperar por tu vuelta,
de nombrarte sin que te importe más.

De tu puta indiferencia,
de tus buenos deseos cuando lejos,
de tu sana distancia cuando cerca,
del sonido muerto del mar.

De tu mirada de niña,
de tu sonrisa cabrona,
de tu juego de estira y afloja
la tira de vena aorta.

De que veas mi corazón en blanco,
de escribirte canciones en mi cama,
de esperar a que llegues a cantarlas,
de estas ganas de verte temblar.

Del miedo, de tu ausencia,
de tu puta indiferencia -confirmo-,
de tu cariño perfectamente meditado,
de buscarte el rostro en cualquier p.

De decir tu nombre para que me llames,
de desearte buenos días,
de beberte en mi café,
de invitarte a mis lugares.

De escuchar que esta vez no, quizá después,
de que al lunes le siga otro lunes,
de mirar la pantalla buscando tu nombre,
de encontrar tanto espacio en tu lugar.

De esperar tu voz,
de soñar tu voz,
de rogar por tu voz,
de ajustarme este bozal.

Piedras frente a la mirada.

Hay una lluvia de piedras frente a mis ojos,
una vuelta imposible cayendo en mi pecho,
adentro,
entre tripas y recuerdos mis enanos beben,
y yo quiero mandar todo al carajo,
desatornillarme el alma,
dejar mi corazón en cualquier esquina,
a los pies de las putas
o dentro de un cesto de basura,

da igual noche que ceguera,
es igual lengua que hielo,
piel o aire,
recuerdo y despedida,

hay una lluvia de piedras haciéndose trinchera,
levantando sus manos - de piedra- frente a mi rostro,
hay un lugar menos jodido que afuera,
hay una gotera cálida en el lavamanos
cruzando la sala,

me da igual tu nombre que cualquiera,
todos sirven para un carajo,
las mil hadas, las mil putas, las palabras,
las 40 noches, los ladrones,
el puente debajo de mi cama,
el recuerdo de tu calle,
de mi pendeja sonrisa en tu acera,

me pierdo en la sonrisa que no tengo,
Adan busca a Eva y se mete con cualquiera,
la serpiente canta,
y confiesa que tiene
el alma de colibrí.

Las piedras vuelan
y nada levanta mi espalda,
el agujero en mi pecho
se llena de espinas,
de páginas,
de recortes de revistas,
con las buenas noticias de los diarios,
se queda solo y no quiere,
apenas respira,
para pasar desapercibido
de la risa fuera de lugar,
vete al pito,
con tu risa y tus labios,
con tus senos,
con tu cara llena de tu sonrisa más pendeja.

El odio es la soledad más profunda,
supongo que hoy estoy solo.

domingo, 16 de agosto de 2015

esperarTE



Me recuesto en la esquina de la cama
con el cuerpo reunido entre las sabanas,
tengo tres mutilaciones y media
colgando de la espalda.

Me levanto a espiar a la ventana,
que nadie se mueva,
que nada cambie,
que no llueva.

Sorbo el cafe de mis manos,
me queman los pies, los pasos
que hay de tu cuerpo a mis ganas
de despertar con los ojos cerrados.

Me espanto con mi cara,
sin tus besos,
me escondo de mi
frente al espejo,

reniego de mi espalda
sin tu uñas clavadas,
en cada espacio al que vuelvo
vuelo, bebo, espero.

Me recuesto en la esquina de la sala,
esperando por el libro que no vimos,
por la copa de vino que debió derramarse
por tus senos, en tus labios o los míos.

Me recuesto sobre hojas de papel
¿Quién cae del árbol?
si aún te espero donde soy sed,
cuando te sueño, con mis manos.

sábado, 15 de agosto de 2015

Quiero verte



Quiero verte llorando,
con el alma destrozada
y el corazón roto
entre las manos.

Quiero que sientas
todo el dolor del mundo,
que te arrepientas
con todas tus voces
- de lobo -.

Quiero verte olvidada,
con el rostro ensombrecido,
con el cuerpo acosado
por la más jodida soledad.

Quiero encontrarte,
perdida, sin saber de rutas
o alas, envuelta en fantasmas
sin pies de bailar.

Que no llegue la sonrisa
a tu rostro, ni los besos
a tus labios, ni el calor
a tu espalda.

Que todo sea frío,
que todo se vuelva
un recuerdo borroso,
incierto.

Quiero verte llorando,
con el futuro a pedazos,
con el pasado en los brazos,
callada, cayendo.

Quiero encontrarte,
sin esperanza,
sin amor para pagar la cuenta,
sin ganas de dar
el siguiente paso.

Para que me extrañes
igual que se extraña
a un hijo o un brazo,
para que vuelvas a mi,
porque jamás te haz largado.

Para que sepas que mi infierno,
es mejor que morir sola,
y estar sola,
llorando.

lunes, 29 de junio de 2015

De tu cálida ausencia mientras llueve.


Puse (play a) tu canción para recordar que te extraño,
que con la lluvia te haces más necesaria que el café
en mis manos, mis labios, aquí,
para hacer dibujos en las ventanas,
para desear resguardarme entre las sábanas.

Estoy cansado y medio ciego,
el humo se inventa en el vapor,
y la música en las gotas golpeando los cristales,
de la ventana, de mis coche, de mis anteojos,
entre el tú y el nosotros
hay más sueños que deseos,
más letras que caricias.

Que ganas de hacerme canción
para besar tu cuello hasta tu oído,
que ganas de ser mis manos
que te desnudaron anoche
sin que tú lo supieras,
sin tu ausencia,
sin ti, sin nada.

Mientras hago un balcón con las palabras
para mirar la lluvia de tu mano,
de la mirada de Dios caemos
amando el recuerdo que amamos,
pensando que somos
el lugar que no merecemos
pero que buscamos.

Puse tu canción sin que te enteres,
sin que sepas siquiera que es tuya,
o que la lluvia me llena de ganas de ti,
de tu ausencia que me abraza
y se hace dulce y cálida,
porque es lo único que  conservo
de tí.

sábado, 20 de junio de 2015

A estas horas de la tarde

A estas horas  de la tarde
cae la lluvia sobre nuestras palabras,
tu piel se vuelve tinta y mis manos
el sonido de mis alas.

Las ventanas se cierran a la luz,
y tus piernas a mis ojos,
se abren los silencios
en tus labios mi nombre
crece más dulce,
besa el aire,
enciende tu cama,
mis momentos
de calma
no corras
delante hay un abismo
que nunca termina,

A estas horas de la tarde
crecen las palabras
y las ganas
ganan la batalla.

Habría que dejarse caer
estrepitosamente,
en caída libre,
igual que mis labios
sobre los lunares
que hay en tu pecho
y en el tatuaje de mis ojos
en tu espalda,
mi deseo revolotea
de tus tobillos
hasta el territorio
- suave -
de tus nalgas,
de tu sexo,
de tu piel salada.

No tardes,
Abril nos ha olvidado
y Agosto promete demasiado,
no tardes, a estas horas de la tarde
llueve y tu cuerpo se forma
de promesas y duerme, a mi lado.

domingo, 10 de mayo de 2015

En el día de las madres

Si espera un poema bello para las madres, de esos que puede leer en la sobremesa o en  el festival de los niños, de media vuelta, esto no se acerca a eso-.

"...she wont let you fly, but she may let you sing..."
Mother by Pink FLoyd



Opide



No soy la copia de tus sueños
prefiero salir del camino
que es el mejor
-solo para tus ojos-
y aflojarme la corbata
para respirar a mi propio ritmo

lustro mis zapatos cada mañana
pero mis pies vuelven
irremediablemente
a posarse sobre el barro

llevo tu nombre tatuado
por razones ajenas
tu foto en la mudanza
porque te reconozco
en sueños y recuerdos
de risas y cristales rotos

elijes el amor
el nombre de mi dios
la marca de mis calcetines
y el color en mis manos
el precio de las flores
la sal en mi comida

soy un camino recto
con las manos limpias
sin culpas
sin pecados

pero no confío en la imagen
que me escupen los espejos,
prefiero ríos
charcos de agua
de sangre
vasos de alcohol

se rasgarían tus ojos
mas que tus vestidos
si me vieras sin la mascara
que me fabricaste con tus manos
llenas de placenta
y pinches apellidos

tengo pelos en la lengua
y en las manos
el corazón volcado
en la entrepierna
prefiero el ocio
a la paz en los sillones

maldigo y odio
porque busco mi reflejo
en las calles
y en los rostros
que se arrastran
o que van sobre asfalto

discuto con la estupidez
entro por la puerta
y salgo por cualquier ventana,
y soy aros de humo
vasos de licor
disfruto de fumar
la hierba santa
mucho más que atragantarme
con recetas para una vida sana

escribo y actuó la provocación
solo por estar chingando,
me creo mis propios mundos
con nahuales
con orgías
sin muros mas altos que mis rodillas
porque no soporto tanta mierda
de camiones y reglas
de un lado lo negro
y del otro lo blanco
cuando hay tanto pinche color
para poner en mi paleta

me gusta darme cuenta
que los demonios tienen alas
y los ángeles pito
y yo ganas de seguir chingando

tus alas me quedaron chicas
y estoy harto
de usar pañales de tela,

tengo alas
nalgas
boca
manos
una espalda
que se ha roto mil veces
y no te has enterado

te amo
mucho mas que a tu pasado
porque quiero amarte
no porque te lo hayas ganado
a punta de gritos y chingadazos
colocados cariñosamente
en mi niñez
en mis frustraciones
y en el diván
en que cada martes caigo

te libero de ser mi guía
que nunca pedí
o el azote
que jamás enderezo mi espalda
ni el manual
sobre el que debo escribir
mi vida
que es un cuento
- que bueno -
con más putas que hadas
te libero
para liberar mis alas.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Despedida entre flores.

"La muerte nos alcanza siempre, e igual nos sorprende aunque la esperemos"
DEP mi abuela.


Quiero decir que me dueles,
en la voz cortada de mi madre,
en las lágrimas que se aguanta
para sostener tu memoria,

en la llama en que te convertiste,
velita tenue, que se apaga
poco a poco,
con los ojos cerrados,
sin poder decir ya nada,

quiero que cantes,
que rías más allá de mi memoria,
quiero abrazarte sin miedo
de romper tus huesos,

quiero darte un beso que recuerdes
hasta la mañana siguiente,
junto a la leche caliente
y una hogaza de pan,

quiero que las aves vuelen,
que las flores coronen tu cabeza,
quiero decirte todo lo que no recuerdas,

hablarte del tren
que nos llevaba a tu ausencia,
nombrar uno a uno
a todos tus hijos,
volver a presentarte  tus nietos.

¡que angustia quererte sin que te enteres!,
¡que tristeza que te vayas!
con este adios de demasiadas noches,
con esta promesa de verte
como cada mañana de sábado,
entre el frío y tu sed,

quiero que se desarme la tristeza
y la soledad que nos dejas,
para guardarla en un cajita
junto a tu mala memoria,
para recordar tu risa
haciendo eco
en los rincones
de tu casa.