que sacudía la piel que ya no tengo?
¿Qué fue de la opresión
del pecho que se rompe
a puro galope y aleteo?
¿A dónde se fueron los ríos
que daban forma a nuestro cuerpo?
¿Qué fue de la ruta de mis dedos,
de la llegada de tu espalda
al territorio de los mismos versos?
¿A dónde nuestas alas
de papel picado a medio vuelo?
¿Qué hicieron con las ganas
de terminar el viaje,
de llegar a mejor puerto?
¿A dónde se largaron las miradas
suplicantes, por un poco de aire,
por la oportunidad de un beso?
¿Qué fue de eso, que otros
más felices, llamarán regreso?
¿A dónde llevan nuestras vidas,
con el camino retorcido, incierto?
¿Qué será de tantas ganas que tuvimos
de llegar corriendo, de la mano,
hasta el siguiente Enero?
¿A dónde llevan nuestros cuerpos,
sin calor, sin aire, sin remedio,
envueltos sin mar y entre sirenas,
sobre un puñado de ángeles,
sin un poco de cielo?
Con respeto a las victimas del descarrilamiento del tren en Galicia.
Si no sabe de qué hablo, dele click.
No hay comentarios:
Publicar un comentario